26 de maig 2013

A FAVOR DELS VALENCIANS


La Història d'Espanya ha estat manipulada durant 40 anys de franquisme, però també abans i després. Un exemple, amb tot el respecte per Antonio Machado i els seus fabulosos Campos de Castilla, pareix com si la generositat dels castellans i la seua rica agricultura, el blat (que els valencians vam deixar de sembrar perquè la citricultara ens va aportar molts més beneficis!), ens hagués estat donant de menjar a tota Espanya després del comerç de la llana de la gran oveja merina o del descobriment d'Amèrica (que va ser un negoci castellà fins ben entrat el segle XVIII, quan Carles III va liberalitzar el comerç que, fins aleshores, havia estat restringit als ports de Cadis i Sevilla), però tothom desconeix que, durant moltes dècades, la taronja va ser la primera font de divises de tot l'Estat i això, culpa nostra (dels historiadors valencians), no figura, pràcticament, a cap llibre de text, ni de Primària, ni de Secundària, ni de Batxillerat... Pot ser, per això s'entén, també, que la Generalitat Valenciana haja permés el tancament del Museu de la Taronja de Borriana (un dels pocs que posa en valor la preciada fruita daurada).

No s'ensenya a les escoles que la taronja va ser, durant molt de temps, la primera font de divises de la pobra Espanya, el segon estat més elevat d'Europa després de Suïssa i amb una altura mitjana de més de 600 m, és a dir, poc apta per a l'agricultura (els tècnics afirmen que a partir de 200 m. d'altitud l'agricultura no és rendible -d'ací la querència dels castellans per la ramaderia-, encara que avui les noves tecnologies poden amb tot) llevat de la Vall del Guadalquivir, les hortes murcianes i valencianes, la petita comarca de La Plana a Castelló, la Vall de l'Ebre i les riques valls navarreses i basques.

En aquest temps que corren, és de valorar el treball d'alguns periodistes per posar els punts sobre les ís, com es diu vulgarment, i per això us convide a llegir l'excel·lent article d'Enric Juliana a La Vanguardia.

ooo000OOO000ooo

A FAVOR DE LOS VALENCIANOS

“El 5 de marzo de 1946, Winston Churchill popularizó el concepto de ‘iron curtain’, telón de acero: ‘Desde Stettin, en el Báltico, hasta Trieste, en el Adriático, ha caído sobre el continente un telón de acero’. Pues bien, esta férrea división europea no fue tan estricta si hablamos de naranjas valencianas: la Unión Soviética compró más de 6 millones de kilos de naranjas dulces, como también Alemania Oriental (4,7 millones), Polonia (1 millón), Hungría (152.000 kilos), Checoslovaquia (4 millones de kilos) o Yugoslavia (71.000 kilos). Podemos imaginar el contexto difícil de aquellas operaciones: una geografía de la guerra fría, de grandes bloques cerrados, con unos medios de comunicación y de transporte aún poco desarrollados, con unos enormes problemas de lenguas, de relaciones políticas y con un régimen político, el de Franco, que no era precisamente próximo, ideológicamente hablando, a los países del Este europeo. Luis Font de Mora, una persona muy relacionada con el mundo de la fruta y de la exportación, recuerda el buen trato y la relación personal cordial que –años más tarde- el embajador de la Unión Soviética en Madrid, altos cargos del ejecutivo soviético, el ballet ruso o Serguei M. Mihalkov, ni más ni menos que miembro del Soviet Supremo y autor de la letra del himno de la URSS y de la Rusia de la actualidad, mantenían con la empresa exportadora valenciana y las visitas que todos ellos hicieron, a finales de los setenta y principios de los ochenta, a las zonas productoras de naranjas de la Ribera o de la Plana”. (“Valencia, la tormenta perfecta”, Josep Vicent Boira, RBA, 2012).

.........................................................................................................

Comerciantes valencianos que cruzan las trincheras de la Guerra Fía con un cargamento de naranjas al hombro. He ahí un buen ejemplo del espíritu más genuino de la sociedad valenciana. Los italianos vendían coches en la URSS; incluso los fabricaron a orillas del río Volga, cuando Fiat instaló una fábrica de utilitarios en Togliattigrad (antigua Stavropol). Los valencianos llegaron a colocar sus mejores cítricos en la mesas del Politburó y del Presidium de la Unión Soviética. Valencia, con un gótico alegre y esbelto y un barroco sin disimulos, siempre ha tenido un punto italiano (un poco de Roma, un poco de Nápoles, una pizca de Bari...) El Renacimiento entró en España por Valencia. Los papas Borja y su singular familia dejaron una fuerte impronta en Roma y en buena parte de la península itálica (luego hablaremos de ello). Como ocurre en casi toda Italia, la sociedad valenciana puede llegar a moverse sin esperar al Estado (para lo bueno y para lo malo). Valencia es itálica con ecos musulmanes; tiene impronta catalana (atención, entramos en campo minado) con fuertes sellos aragoneses y castellanos, variando la proporción y la intesidad según pueblos y comarcas. Valencia es tan compleja que su nombre oficial es resultado de las tensiones de la Transición. Reino de Valencia, decían los regionalistas alérgicos al catalanismo. País Valencià, decían los valencianistas más amigos de Catalunya. El diputado de UCD Emilio Attard, militante en su juventud de la Derecha Regional Valenciana, propuso Comunitat Valenciana y así quedó inscrito en el Estatuto de Autonomía. Ese es el nombre que hoy suscita más consenso (desde el Partido Popular al Bloc Nacionalista Valencià) y a estas alturas de la crisis económica con la que vamos a tener que bailar durante bastante tiempo sería infantil reabrir ahora batallas nominalista. Soy catalán. Mis abuelos hablaban de Valencia en un sentido amplio y genèrico (“València, els valencians, parlen valencià...”), luego tomó fuerza País Valencià y hoy escribo con toda tranquilidad Comunitat Valenciana. No están los tiempos para más batallas nominalistas. Ni tampoco para absurdas prohibiciones. Los temas verdaderamente importantes son otros.


València, el País Valencià, la Comunitat Valenciana -tres en uno-, es tierra de gente con iniciativa, que no tardará en destacar por su empeño en la recuperación económica. Ya está pasando. Ya se detectan algunas señales positivas. No les llamaremos brotes verdes para no convocar el infortunio. Hay movimiento en la industria del calzado, especialmente en Elche y alrededores; se detecta una cierta reactivación de la industria del juguete... La ciudad de Valencia aguanta el tipo con la decisiva ayuda del turismo. La fábrica de autómoviles de Almussafes (Ford) va bien, mientras General Motors cierra factorías en otras partes del mundo (Bégica y Australia). El puerto de Valencia sigue destacando como uno de los más activos en el Mediterráneo en tráfico de contenedores. Y Mercadona ha sido una de las grandes empresas de distribución que mejor ha sabido adaptarse al nuevo contexto económico (En realidad, Mercadona está haciendo algo más que ajustar los precios; está construyendo una narración ideológica de la crisis en España. Su propietario, Juan Roig, uno de los empresarios más influyentes del momento, fue el primero en advertir a José Luis Rodríguez Zapastero de que la crisis no era un parentésis, sino un nuevo estadio histórico de larga duración ). La estructura financiera valenciana ha sufrido gravísimos daños, pero no todo se ha perdido. El Banc de Sabadell, con mucha experiencia en el campo de la pequeña y la mediana empresa, está operando con la red de la CAM y Caixabank mantendrá en vida el Banco de Valencia, antiguo estandarte de la burguesía mercantil valenciana. Ambas entidades catalanas están actuando con tiento y se van a implicar en el tejido productivo local. No hay ‘imperialismo’ y no han sido recibidas con hostilidad. Podríamos citar otras señales positivas.

Luego está la otra cara de la moneda. La dura, la difícil, la que la mayoría de la gente ve cada día. La crisis y su traducción local. La Comunitat Valenciana se ha convertido para muchas personas en símbolo de algunos de los principales excesos que caracterizan la crisis española. Una visión que debe de ser discutida, aunque contenga elementos de verdad. Cuidado con estigmatizar a los valencianos. No estamos ante un erial. Cuando vean a Valencia levantando cabeza, cosa que ocurrirá, enciendan una llama votiva: señal de que la crisis económica está cediendo. La Comunitat Valenciana es hoy la principal piedra de toque de la crisis económica y política en España. Anotemos esté dato en la agenda y no lo perdamos de vista en los próximos dos años.

La crisis está haciendo estragos, pero es injusto convertir Valencia en el peor estereotipo de la actual situación. Los chivos expiatorios son el mejor amigo del hombre, forman parte del combate político y conviene examinarles siempre el pelaje. Se está produciendo en España, con particular intensidad en la plaza de Madrid, una insólita convergencia entre la derecha de la derecha y la izquierda mediática e indignada. Ambas corrientes parecen haberse puesto de acuerdo en señalar a la Comunitat Valenciana como ejemplo señero y superlativo de los desmanes hispánicos. La derecha madrileña es centralista de día y centrífuga de noche. Sueña despierta con la recentralización para recuperar poder y expulsa sin contemplaciones los problemas más desagradables hacia la periferia, así en lo material como en lo espiritual. Cuando vio venir la crisis del Estado del Bienestar, gritó “¡Autonomías, culpables!” y vive Dios que ese grito ha tenido efecto en la sociedad, como a día de hoy señalan todas las encuestas. Cuando vio venir el caso Gürtel (un torpedo con mucha carga) dijo: “¡Esto es cosa de los valencianos!”. Y algunos destacados exponentes de la derecha valenciana tardaron en descubrir el cambio de dirección del proyectil, de manera que ni siquiera optaron por un atuendo y unos modales más discretos cuando le vieron avanzar por el lecho del Turía.

A su vez, la izquierda mediática e indignada cree haber encontrado un filón fantástico en Valencia. Hay asuntos feos en el armario -el más feo de todos, la manera como fue tratado el terrible accidente del metro en vísperas de la visita de Benedicto XVI en el 2006- y un muy amplio catálogo de irregularidades políticas y urbanísticas, fruto de una apuesta a todas luces excesiva por el suculento negocio inmobiliario. La izquierda mediática disfruta con los asuntos valencianos y es algo más ponderada, por poner un ejemplo, con algunas densidades de esa Andalucía que aún no ha conocido la alternancia en el Palacio de San Telmo.
En toda España cuecen habas –también en Catalunya- y aún falta perspectiva histórica para acabar de ajustar el mapa de los desaguisados. En estas últimas semanas el nudo principal del relato ha vuelto a situarse en Madrid con fuertes torbellinos alrededor de Bankia y el asunto Gürtel. Ahí está el núcleo. Y ya emos tenido noticia de ello. Noticia con muchos decibelios: las furibundas declaraciones de José Maria Aznar contra la “languidez” del Gobierno Rajoy.



Presentar Valencia como caricatura principal de la España corrupta y quebradiza es abusivo, injusto y políticamente erróneo. La corriente política que intente obtener éxito electoral con este exclusivo relato puede tener un disgusto dentro de dos años. Hay mucha indignación, hay mucho descontento, hay mucho malestar, hay mucha perplejidad, pero la pulsión más profunda de la sociedad valenciana no va por ahí. Esa es mi impresión después de más de seis años de frecuentes viajes a Valencia y de una continua interlocución con personas de diversas tendencias y profesiones. Los valencianos no están contentos con lo que ha pasado, evidentemente. Les duele y les afecta la crisis. Han pasado del euforia al desconcierto y del consenso a la crítica, a la crítica acerba, incluso; pero muchos de ellos soportan mal el actual bombardeo mediático sobre los errores y desmanes cometidos en su tierra. Subrayo ese dato, porque me parece significativo. Cuidado con la sobreexplotación del estereotipo.

Podríamos decir que Valencia está redescubriendo su lugar en el mapa. Le interesa la conexión con Madrid, pero está llegando, lentamente y con prevenciones, a la conclusión de que también le conviene una buena vecindad con Barcelona. Mejor dos aliados que uno solo. El anticatalanismo no ha desaparecido, pero ha perdido intensidad. El anticatalanismo no reporta hoy ningún beneficio económico, aunque puede volver a tener alguna utilidad política en el nuevo ciclo electoral. Se detectan algunas tensiones en el interior del Partido Popular, donde un sector del mismo podría verse tentado por un regionalismo defensivo ante la hipótesis de un cambio de mayoría electoral. Recordemos que el PP, de la mano de Eduardo Zaplana, logró absorber hace unos años a Unió Valenciana. La decisión de Rita Barberá de volver a presentarse como candidata a la alcaldía de Valencia, anunciada ayer, es en este sentido un dato significativo. Con Barberá al lado de Alberto Fabra, hay menos margen para maniobras escisionistas. El PSOE-PSPV se mantiene a la baja, aunque posiblemente ya ha tocado suelo. La novedad de este curso es Compromís, la singular coalición electoral del Bloc Nacionalista Valencià, Iniciativa del Poble Valencià y grupos ecologistas, que se ha convertido en el principal catalizador de la protesta y el malestar. Algunas encuestas ya le situan muy cerca del PSOE en intención de voto. Se esboza la hipótesis de una posible mayoría tripartita PSOE-Compromís-Izquierda Unida, sobre la que me permito tres comentarios: es una especulación prematura, la palabra tripartito no tiene buena prensa (está quemada para un largo periodo de tiempo) y no debe olvidarse que el PP sigue teniendo una muy uerte implantación orgánica en toda la comunidad. La incierta basculación de Compromís entre la moderación (Enric Morera, del Bloc) y una mayor radicalidad con ecos mediáticos (Mònica Oltra, de Iniciativa) es una cuestión de interés para los próximos meses. Puestos a especular, apunto la siguiente hipótesis: la Comunitat Valenciana, rótula de la España compleja, podría acabar siendo punto de encuentro entre PP y PSOE dentro de dos años. Al tiempo.


Las elecciones quedan lejos. Los temas importantes ahora son la financiación de la autonomía (a corto y medio plazo) , la viabilidad del sector público y los atisbos de recuperación económica: la fortaleza del turismo, las iniciativas de reindustrialización y la logística. Amplio consenso sobre el Corredor Mediterráneo, convertido en eficaz metáfora de una nueva orientación económica y de un nuevo rol valenciano entre Madrid y Barcelona. Metáfora que no acaba de gustar en todo el PP español. El Corredor Mediterráneo ha ganado una primera batalla de opinión pública, pero el mapa de los próximos 25 años aún no está dibujado. El tercer carril ferroviario (para mercancías) anunciado por el Ministerio de Fomento es un primer paso. Un primer paso muy influido por las reclamaciones del cuadro directivo de General Motors, puesto que Ford Almussafes necesita de manera urgente una conexión ferroviaria con Europa.

La crisis está descarnado muchas cosas. La crisis explica la imparable implantación del déficit ‘asimétrico’ en España, que tanto disgusta a Aznar. El Gobierno no puede dejar que colapsen las autonomías del Arco Mediterráneo (Catalunya, Comunitat Valenciana, Baleares y Murcia) donde se produce más del 35% del PIB y el 50% de las exportaciones. Le podemos dar muchas vueltas al rompecabezas territorial, pero al final del día nos encontraremos con el diagnóstico que el presidente del Deutsche Bundesbank, Jans Weidmann, efectuó ante un grupo de periodistas españoles el pasado mes de feberero en Francfort: “No se hagan ilusiones, esta crisis será larga, un ciclo de diez años, y en ese ciclo España deberá apoyarse en aquellas regiones más capaces de exportar”.

Valencia está redescubriendo su lugar en el mapa en medio de una tremenda confusión económica, social y política. Y soporta mal la sobreexplotación política y mediática de sus estereotipos negativos. Cada vez lo soportará peor. Lo cual me recuerda la leyenda de los Borja (Borgia, en italiano). Dos papas valencianos, Calixto III y Alejandro VI, tío y sobrino. Inteligentes y audaces. Siglo XV. Calixto, protegido de san Vicenç Ferrer, reconquistó Constantinopla y anuló la condena que había llevado a la hoguera a Juana de Arco. AlejandroVI definió el tratado de Tordesillas (1494), por el que España y Portugal se repartieron el Nuevo Mundo, y a través de su intrépido hijo César estuvo a punto de articular una cierta unidad política de la península italiana. César Borja y Fenando de Aragón inspiraron a Maquiavelo en la redacción de ‘El Príncipe’. La eficacia política de los Borja puso de los nervios a la aristocracia romana, temerosa de perder el control pontificio. (“Oh, Dio, il Vaticano nelle mani dei catalani”, decían aquellos años en Roma, sin entrar en mayores disquisiciones sobre catalanes y valencianos: aún no habían llegado ni el barroco, ni el Estado de las autonomías). De ese nerviosismo y temor surgió buena parte de una leyenda negra que aún perdura y que ha hecho correr ríos de tinta. Un sabio catalán, el jesuita Miquel Batllori, se esforzó en desmontar ese mito (‘La familia Borgia’, 1994). Gente de carácter los Borja/Borgia. No eran santos, tenían ambición, intentaron construir una dinastía, incomodaron al poder romano y perdieron el control de su historia.

Cuidado con las leyendas.



TEMA 15: LA CIUTAT I EL MÓN URBÀ (2 ESO)


1. El poblament urbà. Una aproximació a la ciutat 
• El poblament és l’assentament humà en un territori. Aquest pot ser rural (pobles i viles) o urbà (ciutats). 
• Els criteris per definir ciutat són: 
– El nombre d’habitants. A Espanya una ciutat és una concentració de més de 10000 habitants. 
– L’ocupació dels residents. Hi han de predominar les activitats del sector secundari i les activitats del sector terciari. 
– La forma o morfologia. Ha de ser un medi construït, amb espais densament ocupats. 
• Les funcions urbanes són les activitats que han fet desenvolupar les ciutats i canvienamb el temps: 
– Residencial: és la que ocupa més sòl urbà. 
– Comercial i financera: el comerç comporta altres activitats paral·leles (bancs, hotels...). 
– Administrativa i política: constitueixen centres de l’administració i del poder polític. 
– Industrial: impulsades per la industrialització. 
Algunes ciutats destaquen perquè tenen una funció principal, que pot ser religiosa,cultural, turística...


2. El creixement urbà actual
• Actualment es podueix un creixement urbà accelerat. Les ciutats formen aglomeraciones urbanes, com ara: 
– Àrea metropolitana: abraça una gran ciutat i la zona urbana que l’envolta. 
– Conurbació: conjunt de diverses àrees metropolitanes que formen un continu urbà. 
– Megalòpolis: la suma de diverses conurbacions. 
• Com més funcions té una ciutat, més gran n’és l’àrea d’influència i el rang que ocupa en la jerarquia urbana. 
• Els nivells bàsics de la jerarquia urbana mundial són: 
– Metròpolis globals: influencien el món. Són seus d’empreses i d’organismes internacionals. 
– Metròpolis mundials: tenen projecció internacional. Solen ser seus de multinacionals. 
– Metròpolis nacionals: solen ser capitals d’Estat. Concentren un gran nombre de funcions i serveis. 
– Centres regionals i comarcals: són ciutats de dimensions mitjanes i nuclis més petits. 
• Entre els tipus de plans urbans destaquen: l’irregular, el radiocèntric i l’ortogonal.

3. Un món de grans ciutats
• Les ciutats o urbs es caracteritzen per aquests trets: 
– Són grans aglomeracions urbanes. 
– Mantenen moltes desigualtats internes. 
– Posseeixen alts nivells de desenvolupament gràcies a la concentració d’empreses amb un grau elevat de tecnologia i innovació. 
– Són competitives entre si en un context mundial. 
• Les ciutats dels països desenvolupats posseeixen un centre urbà, que a Europa és el nucli històric, una àmplia zona densament edificada i una perifèria d’urbanització difusa. 
• Les ciutats dels països en procés de desenvolupament són enormes aglomeracions urbanes que tenen una densitat molt elevada, una urbanització espontània i equipaments escassos. 

4. La ciutat europea al llarg del temps
• A la ciutat preindustrial distingim: 
– La ciutat antiga, amb origen en les colonitzacions grega i romana. Les urbs romanes tenien un pla ortogonal i infraestructures. 
– La ciutat medieval, petita i emmurallada, amb carrers estrets i traçat irregular. 
– La ciutat de l’Edad Moderna, de planificació ordenada, amb un traçat regular i nombro­sos edificis. La capital de l’Estat va adquirir importància. 
• La ciutat industrial va sorgir amb la construcció de les fàbriques. La població va augmentar ràpidament, es van derruir les muralles i es van construir els eixamples. Van sorgir els barris perifèrics. 
• La ciutat postindustrial va sorgir a la darreria del segle XX. A causa de l'elevat preu del sòl al centre de la ciutat i a les noves comunicacions les activitats i la població s'escampen i s'hi formen àrees i regions metropolitanes. 

5. L’espai urbà a Espanya
• Les ciutats espanyoles se solen ordenar segons una jerarquia de ciutats, d’acord amb la po­blació, les funcions urbanes i l’àrea d’influència: 
– Metròpolis nacionals: més d’1500000 h. 
– Metròpolis regionals: entre 500000 i 1500000 h. 
– Metròpolis subregionals: de 200000 a 500000 h. 
– Centres subregionals: entre 50000 i 200000 h. 
– Capitals comarcals: de 10000 a 50000 h. 
• Els eixos de desenvolupament urbà relacionen les activitats per mitjà de xarxes de transport. A Espanya són: 
– Eix mediterrani: inclou metròpolis amb infraestructures de comunicacions i de turisme. 
– Eix cantàbric: inclou antigues zones industrials. 
– Eix de la vall de l’Ebre: uneix els dos eixos anteriors. 
– Eix atlàntic: situat a Galícia. 
– Eix andalús: vall del Guadalquivir i àrees litorals. 

6. Les ciutats valencianes
• El creixement urbà més accelerat i espectacular va tenir lloc a partir de l'any 1960, amb el desenvolupament de l'activitat turística en tota l'àrea costanera o pròxima al litoral. Aquest és el cas de localitats com ara Torrevella o Benidorm, convertides en grans ciutats turístiques. 
– La Comunitat Valenciana compta amb un percentatge elevat de població urbana (més del 82% del total) i amb una xàrcia de ciutats densa i complexa. El major dinamisme urbà es localitza en: 
• Les àrees metropolitanes, que presenten un model territorial molt polaritzat (tant demogràficament com econòmicament) al voltant de les grans ciutats que les formen: València, Alacant-Elx i Castelló de la Plana. El creixement de les àrees metropolitanes és degut a la dispersió de la població, que s'allunya del centre per viure en els municipis veïns; a la descentralització de les activitats productives, perquè es creen parcs i polígons industrials, complexos d'oci, centres comercials, etc., i a laconstrucció de noves infraestructures viàries, com ara rondes, cinturons, autovies, etc. 
• Les àrees litorals són les que reuneixen el major dinamisme urbà per la seua activitat turística. Durant les últimes dècades, una part de la població turística estacional (turistes i persones jubilades) s'ha anat instal·lant en aquestes àrees de manera permanent, i ha convertit moltes segones residències en primeres, fet que, sovint, comporta problemes en l'organització dels serveis públics, les infraestructures i els equipaments. Algunes localitats han seguit un model de creixement especulatiu i poc sostenible, basat en edificis de gran alçària o en urbanitzacions que ocupen grans superfícies. 
– El sistema urbà.- D'acord amb el nombre d'habitants i amb el tipus de serveis que ofereixen les ciutats de la Comunitat Valenciana, s'estableix una jerarquia urbana que està formada per: 
• Una metròpoli regional. Correspon a la ciutat de València i la seua àrea metropolitana, ja que és la capital autonòmica i el nucli urbà amb més habitants. La ciutat exerceix funcions politicoadministratives, terciàries i industrials. 
• Metròpolis subregionals. Formades per les ciutats d'Alacant i Elx. Aquests nuclis reuneixen activitats industrials, turístiques i de serveis. 
• Centres subregionals o ciutats mitjanes. El més important és Castelló de la Plana; el segueixen ciutats intermèdies com ara Torrevella, Oriola, Torrent, Gandia, Benidorm, Sagunt, Vila-real, etc. Són destacats centres industrials i de serveis (sanitat, comerç, transports…). 
• Altres centres urbans. Aquest grup és molt nombrós, perquè en la nostra Comunitat abunden les ciutats petites amb poblacions que oscil·len entre els 10 000 i els 30 000 habitants. Aquests centres ofereixen béns i serveis de caràcter bàsic. Alguns dels més poblats són: Calp, Xàtiva, Sueca, Crevillent, Algemesí, Oliva, Borriana, Vinaròs, etc.

8 de maig 2013

TEMA 14: LA POBLACIÓ ESPANYOLA (2 ESO)




1. La població espanyola i la seua distribució 
• La població d’Espanya s’acosta als 47,2 milions d’habitants, amb una densitat mitjana de 93,3 h./km2, una xifra inferior a la mitjana de la Unió Europea, que és de 116 h./km2. 
• La població espanyola es reparteix de manera desigual: 
– Les zones de més densitat són la perifèria peninsular i les àrees que hi ha prop, la Comu­nitat de Madrid, l’arxipèlag balear i el canari i les ciutats autònomes de Ceuta i Melilla. 
– Les zones amb menys densitat de població són les de l’interior de la Península i, sobre­tot, les zones agrícoles de secà i les àrees de muntanya. 
• Les causes d’aquesta distribució irregular de la població són producte del procés desigual de desenvolupament econòmic, que es va situar preferentment a les zones litorals i a les ciutats, que és on s’han concentrat la majoria de les activitats industrials i dels serveis, sobretot el turisme.




2. L’evolució de la població espanyola 
• La població espanyola evolucionà segons el model de transició demogràfica dels països des­envolupats, bé que començà més tard que en altres països europeus: 
- Fins al principi del segle XX la natalitat i la mortalitat eren altes (fase d’estabilitat demogràfica). 
– Al segle XX la mortalitat va començar a baixar i la població va augmentar considerablement. 
– A partir del 1975 la taxa de natalitat va baixar quasi fins a igualar-se amb la taxa de mortalitat. El creixement vegetatiu era molt baix. 
• Actualment la dinàmica de la població espanyola es caracteritza per aquests fets: 
– La davallada de la natalitat. A Espanya la taxa de fecunditat és d’1,38 fills per dona. Però l’arribada de població jove estangera ha provocat un lleuger augment de la natalitat. 
– L’augment de l’esperança de vida (85 anys per a les dones i 79 anys per als homes) crea un procés d’envelliment de la població. Com a conseqüència, es preveu un augmentde la mortalitat.




3. Els moviments migratoris a Espanya 
• L’emigració espanyola en temps passat va ser provocada per la necessitat de trobar faena a causa del creixement de la població i de la pobresa. 
• L’emigració espanyola a l’Amèrica Llatina va ser massiva a la segona meitat del segle XIX, continuà a la primera meitat del XX i va baixar després de la crisi del 1929. 
• L’emigració espanyola cap als països rics i industrialitzats de l’Europa Occidental va tenir lloc cap a mitjan segle XX. Va ser una emigració de mà d’obra agrària i industrial. 
• A mitjan segle XIX començà un procés d’emigració interna, especialment cap a Catalunya i el País Basc, on es desenvolupava la indústria. 
• L’emigració interna massiva va provocar un envelliment de la població als llocs d’origen i el creixement de les ciutats de destinació. 
• L’emigració interna massiva va provocar un envelliment de la població als llocs d’origen i el creixement de les ciutats de destinació. 
• L’emigració espanyola més recent la formen persones joves (25-35 anys), molt qualificades, que busquen faena en altres països davant la baixa ocupació causada per la crisi econòmica que va començar el 2008.



4. La immigració estrangera a Espanya
• A partir del 1990 el creixement econòmic va fer d’Espanya un país receptor d’immigrants. Actualment el 12,2% de la població espanyola és estrangera, això és, 5,7 milions de persones.
• La composició de la immigració que arriba a Espanya es classifica en tres grans grups: immigració econòmica i laboral; immigració d’alt nivell professional i estudiants; i immigració residencial.
• La immigració té efectes positius:
– Ha fet possible l’augment de la població.
– Les aportacions dels immigrants a la Seguretat Social contribueixen a pagar les pensions.
– Permet disposar de mà d’obra barata.
• L’arribada dels immigrants també provoca noves problemàtiques. Per això hi ha moltes asso­ciacions que treballen en pro de la interculturalitat.



5. L’estructura de la població espanyola
• L’estructura demogràfica de la població espanyola comprén:
– La distribució per edat: joves de fins a 15 anys, 15,8%; adults entre 16 i 64 anys, 67,1%; i gent major de 65 anys i més, 17,1%.
– La distribució per sexe: hi ha un nombre més alt de dones que d’homes.
• L’estructura econòmica de la població espanyola es reflecteix en la població activa, que re­presenta més del 60% de la població total.
• La població ocupada per sectors econòmics es distribueix entre el sector primari (4,3%), el secundari (23,1%) i el terciari (72,6%).
• La població en atur varia en funció del sexe i l’edat (afecta més les dones i els més jóvens). La manca de faena crea un greu problema social i torna a sorgir la necessitat d’haver d’emigrar.
• La llei espanyola contempla la igualtat de drets entre homes i dones. Malgrat les fites que han assolit les dones, encara existeixen diferències de gènere.



6.- La població valenciana
6.1 La distribució de la població.- La Comunitat Valenciana és la quarta comunitat autònoma més poblada d'Espanya. Té una població de més de cinc milions d'habitants, que representen el 10,8% de la població total d'Espanya, i una densitat de 220 hab./km2, molt per damunt de la mitjana espanyola, 93,3 hab./km2. La població valenciana té una distribució molt desigual sobre el territori: 
· Les zones més poblades es troben en el sector oriental de la Comunitat. Corresponen a la ciutat de València, l'Horta i altres comarques del litoral, com ara l'Alacantí, el Baix Vinapoló, la Safor i el Baix Segura. En aquesta zona, hi viu quasi el 50% de la població de la Comunitat. 
· Les zones menys poblades estan en el sector occidental i coincideixen amb les comarques muntanyoses del nord i de l'interior de la província de Castelló i amb l'interior de la província de València, el Racó, l'Alt Millars i els Ports.
6.2 L’evolució de la població.- Des de la dècada del 1960, la característica principal de la població de la Comunitat Valenciana va ser el seu augment progressiu, a causa, sobretot, de l'increment de la natalitat (majoritàriament per la fecunditat de les mares estrangeres), de la disminució de la mortalitat i de l'augment de la immigració. No obstant això, actualment aquesta tendència ha canviat. La població de la Comunitat Valenciana es manté estable a causa de la disminució progressiva tant del creixement natural de la població com de la immigració estrangera. Així doncs, les característiques actuals de la població de la Comunitat Valenciana han variat respecte d'anys anteriors:
· S'ha produït una lleugera disminució de la natalitat (10,3‰), tant entre les dones valencianes com entre les dones estrangeres. 
· Les dades més recents mostren un petit augment de la mortalitat (8,3‰). 
· La població estrangera disminueix en relació amb altres anys (1,8%). Malgrat això, la Comunitat Valenciana segueix sent la segona comunitat autònoma que té el major nombre de població estrangera d'Espanya. 
6.3 La immigració estrangera.- A la Comunitat Valenciana resideix al voltant d'un 16% del total d'estrangers que hi ha a Espanya. El 55,4% dels immigrants procedeixen de la Unió Europea, mentre que el 44,6% provenen de l'Amèrica Central i del Sud, d'Àfrica i d'Àsia. De les tres províncies valencianes, Alacant és la que té més població estrangera, la majoria originària de països del nord d'Europa; es tracta d'una immigració de tipus residencial. En la resta del territori, hi predomina la immigració laboral, és a dir, la d'aquelles persones que vénen a la recerca d'oportunitats de faena i de millores econòmiques. En la província de Castelló resideix el col·lectiu més gran de romanesos de tota Espanya. Els immigrants es concentren principalment en les grans ciutats de la Comunitat Valenciana, on treballen en el sector agrícola, en la construcció, en la restauració i en el servei domèstic.

Laulauenlaseuatinta

Laulauenlaseuatinta
https://laulauenlaseuatinta.carrd.co/

La Guerra de Successió a Vila-real

Himne a Vila-real (1274-2024)

Posts més consultats

Visualitzacions de pàgina l'últim mes